La cinta de embalaje ofrece una solución versátil y práctica para diversas aplicaciones cotidianas, como embalajes, reparaciones y etiquetado de productos. Y la cola termofusible es una buena alternativa.
Con la gran variedad de adhesivos y cintas de embalaje disponibles, la elección puede resultar a menudo compleja. Depende de varios factores, como la finalidad de la aplicación, el tipo de superficie que se va a pegar y el entorno de uso.
Existe una gran variedad de cintas de embalaje diseñadas para satisfacer diferentes necesidades. Algunos ejemplos son:
Menos conocido por el gran público que la cinta de embalaje, la cola termofusible se recomienda en determinadas situaciones.
El adhesivo termofusible es más resistente que la cinta adhesiva a las grandes variaciones de temperatura.
También se adhiere con mayor eficacia a materiales como la madera y el metal. A menudo se presenta en forma de barra para su uso con pistola encoladora, por lo que ofrece una precisión superior. Esto significa que puede aplicarse de forma más flexible que la cinta adhesiva, por lo que suele ser una solución más económica.
El término "cinta adhesiva" es un nombre genérico para la cinta de embalaje recubierta de adhesivo por una cara.
Por otro lado, "Scotch" es el nombre de una marca registrada para un tipo específico de cinta adhesiva. Esta marca se ha vuelto tan emblemática que a menudo se utiliza como término genérico para referirse a cualquier cinta adhesiva, pero solo se trata de un abuso del lenguaje.